22 de noviembre de 2011

Aunque las luces navideñas no estén encendidas

La tarde había caído hacía un rato, y había dejado paso al frío de Noviembre. Un frío agradable que me erizaba la piel. Frío en los dedos de las manos, frío dentro de mis calcetines. Pero un calor reconfortante en mis labios. Un calor que da vida a los muñecos de nieve cuando estamos tan bien juntos. Y cuando me voy, todavía permaneces en mi boca, como un regalo permanece toda la noche bajo el árbol.


I've bought some corn for popping 

1 comentario:

  1. Siempre te conservo en mis labios después de no tenerte a mi lado y eso me encanta <3

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