2 de agosto de 2017

Inyección.

Llueve sobre el Raval en esta tarde de Agosto. Desde la ventana del médico veo cómo se moja mi bicicleta y espero los resultados de los análisis. El gris del cielo lo está cubriendo todo. Llega el M

édico, también con el pelo gris y la voz gris. Las voces grises me calman los nervios.

Mi nuevo lugar en la sala de espera ya no está cerca de la ventana. Ya no veo la lluvia ni veo mi bicicleta. Solo hay tres anónimos abstraídos en sus teléfonos que, de vez en cuando, van perdiendo anonimato cuando el médico les llama.

-¡Edgar López!

Es mi turno. Pero pronto las cosas cambiarán.

31 de diciembre de 2013

Supernova

Para haber sido una estrella te ves demasiado apagada. No puedes dejar de sentirte avergonzada y decepcionante. No mereces tu cuerpo, tu nombre ni tu origen pero, ¿a qué más puedes optar? Desde luego no a lo material, quieres ser el concepto: la Nada.
El aire se abría para dejar paso a su cuerpo, que se desplomó en el suelo con un golpe seco. A unos centímetros de sus manos, unos papeles con notas académicas y un reproductor de música que aún seguía emitiendo It's about to get worse a todo volumen. Era un chico guapo, y esto era un hecho probado, ya que la gente se acercó a ayudarlo. La gente nunca se acerca a ayudar a personas feas.
He dado un giro y me he encontrado con una pared. He vuelto a perderme en el laberinto de mi propia personalidad para encontrarme de cara con algo nuevo. No es un muro de hierba mullida, es un muro de ladrillo y cemento. Ahora me planteo la posibilidad de volver atrás, de reencontrarme, pero no me convence. Es más grande la tentación de incendiar aquellos setos que tanto me confundían.
Ha pasado el tiempo, y la verdad, no del todo desagradable, asoma. Asoma desde las ramas bajas de los árboles. Desde detrás de los arbustos y de las piedras. Asoma desde debajo del puente que cruza el río. La verdad asoma y se ríe de mí por no saber encontrarla más allá de los libros. Pero la verdad no es plana, y no se puede esconder entre dos hojas de papel.
Estaba sentado en el autobús, sosteniendo un libro que no estaba leyendo. Miraba por la ventana mientras pensaba en aquel poema que un día escribió a un desconocido. Lo cierto es que no estaba mal, pero aquel desconocido nunca llegó a saber de él. Es curioso el resultado del anonimato

15 de agosto de 2013

Dirty is dead and I'll never sleep again

Ha llegado el momento de las despedidas, si es que alguna vez ha existido. Abandono este lobo al borde del camino con la esperanza de que no vaya muy lejos, así podré hacerle una visita de vez en cuando. Y quizá llegado el invierno pueda volver a recogerlo y volver a cuidar de él. Me voy, pero le dejo en una oreja la promesa de volver, y en la otra un consejo:


Fuig abans de que s'obri la veda.

4 de julio de 2013

Tetradínamos

Somos herbívoros. Comemos las flores que crecen en nuestros cuerpos, con ese aroma tan poco floral pero que tanto nos gusta. Sabemos que el sabor no es el mismo, pero disfrutamos con su amargura. Por mucho que nos pese, por mucho que queramos comer también algo de carne, sabemos que nunca seremos capaces de tragarla. Que lo único que podremos digerir son los estambres oscuros.


I move in water, shore to shore

25 de junio de 2013

Muerte de un viejo romántico

Y cuando muera no quiero que lloréis, ni que me recordéis con tristeza. No quiero flores ni ceremonias. Todo eso os lo podéis ahorrar. Con ese dinero prefiero que os vayáis todos a un restaurante y os hinchéis a comer y a reír contando mis anécdotas. Que yo no quiero molestar a nadie, sobre todo no quiero molestar a nadie...


Tantas promesas que quedaron en promesas.

9 de junio de 2013

Vino distinto

Volví a verle después de algún tiempo, y algo en él había cambiado. Ahora tenía dentro un silencio como una herida: largo y profundo. Supuse que el origen del cambio estaba en el abandono que había detrás de cada puerta cuando todos dejamos el piso para coger nuestros aviones. Y el vino que había en su despensa... Era vino distinto.


We’ve learned to hide our bottles in the well

22 de mayo de 2013

And then the crown fell to the ground

Paseaba por encima de nosotros, con esos movimientos espasmódicos propios del frío nórdico. Su mirada vagaba entre nosotros, y su atención se paró en aquel objeto brillante que tenía entre mis manos. Se posó ante mí como caída del cielo, y con una reverencia me permitió coronarla. Volvió a alzarse, y la multitud gritó. Y más tarde, el mundo la reconocería como la reina.


Can you see the scar in the perfect sky?

17 de mayo de 2013

7:01 a.m.

Llevo demasiado tiempo siendo un nocturno. La noche ya no me guarda ningún secreto. Esa mezcla de misterio y fascinación hacia la oscuridad mal disimulada que durante años ha asediado al hombre, conmigo se ha dado por vencida. Ese ejército se ha retirado, dejando a paso a los cañones de luz que, sin avisar, llegan pronto en la mañana. Ahora ese es el misterio que más me cuesta descubrir.


We're up all night 'till the sun

15 de abril de 2013

Netherlands

A penas he tenido tiempo de perderme entre esos edificios, la mayoría oscuros, puntiagudos y con unas ventanas enormes. Casi no he tenido tiempo, digo, de pasear sin rumbo junto a los canales, bajo las gaviotas y sobre los adoquines. Me ha faltado tiempo para hacer algunas fotos y, haciendo honor a las costumbres (¿Cómo no?) entrar en un Coffe Shop y fumar algo de costo.
De lo que sí he tenido tiempo es de enamorarme de esta ciudad. De proyectarme en ella. Ahora la distancia y la reflexión hacen que me de cuenta de que una gran parte de mí siempre ha estado allí. De que cuando nací bien podrían haberme llamado Ámsterdam. I amsterdam. Soy cada barquita inestable de sus canales. Los coches que aparcan justo en el borde. Soy el caos aparente de tranvías, bicicletas y peatones. Soy, aunque no reconozca que me guste, cada escaparate del barrio rojo, con todo lo que eso conlleva. Cada avión que aterriza. Cada tren que se va.

10 de abril de 2013

24/7

"Lo haré, les decía sonriendo la niña, sólo soy una esclava: la esclava del Señor. Se acordaba de la frase de su amiga y la repetía complacida porque le traía su recuerdo. La obediencia tenía que ver con la felicidad, era consentir, renunciar al ser. El no ser era la riqueza, dejarse llevar por lo que te salía al paso, como hacían esas ramas que se llevaba la corriente de los ríos: no perseguir objetivo alguno."


Y que se duerma el mar, Gustavo Martín Garzo

1 de abril de 2013

Enroque

Llevaba tanto tiempo mirando el tablero que ya había olvidado la mitad de los movimientos. Y entonces, justo entonces, apareciste, y paraste mi contador. Moviste un peón. Empezaste un juego limpio y pulido, pero oscureció con la mañana. De pronto, cambiaste tu Rey por una Torre. Lo encerraste tras tus murallas. Y nunca más se supo. 


I'll go out there and find me another boy to pass the time.